El Tribunal de Disciplina de la Liga Saenzpeñense de Fútbol tendrá arduo trabajo para definir sanciones ejemplificadoras en los incidentes producidos el viernes último en la séptima fecha del Torneo Clausura “Alfredo Godoy”, que tuvo distintos protagonistas y dejó varios lesionados.
Fue en el marco del enfrentamiento “literal” del Deportivo Unión y el Atlético Sportivo, que inauguraban la séptima jornada del certamen, y que en este caso se originó ni bien concluido el encuentro de tercera división especial, con victoria del “decano” por 1 a 0.
La mecha que encendió la reacción habría sido el gesto que un jugador “albiceleste” realizó ante la parcialidad de los “bichitos colorados” una vez consumada la victoria. Ahí comenzaron las corridas, los insultos, la intervención de cierto sector del público y dirigentes, algunos para atacar y otros para dispersar.
Todo esto ante la impávida reacción del personal policial afectado al encuentro, que una vez más adujo que “están para custodiar al árbitro”. Error, una frase que se ha ido instalando y que ha quedado como ley en los agentes del orden, que son contratados para ofrecer seguridad al espectáculo para el cual han sido contratados. Y, dicho sea de paso, en los últimos tiempos prácticamente se juega si la policía quiere.
Volviendo a los incidentes, en un par de videos que están circulando se observa el enfrentamiento de mujeres, con una de ellas gravemente afectada en una oreja (recibió 7 puntos de sutura). Al decir de varios presentes, otra mujer descargó un termo de agua caliente en un allegado al club local.
Son situaciones graves, que no se pueden disimular, maquillar ni dejar pasar por alto. Los adultos son los principales responsables de transmitir un buen ejemplo, más aún quienes tienen responsabilidades en los manejos de grupos en los clubes.
