El clásico que este domingo sostenían Belgrano y Aprendices fue suspendido a la media hora de juego cuando igualaban 0 a 0, como consecuencia de incidentes que se produjeron en el partido y una agresión sufrida por el juez asistente José Escalante. El encuentro correspondía a la octava fecha del Torneo Apertura “Luis Ángeli” de la Liga Saenzpeñense.
No pasaba mucho en uno de los históricos duelos del fútbol de la “termal” entre General Belgrano (8) y Aprendices Chaqueños (6), hasta que luego de los 20’ el lateral “ferroviario” Pablo Ramos recibió una falta y allí se generó un tumulto frente a la parcialidad “rojinegra”.
Como consecuencia de esa situación, que parecía no pasaría a mayores, fueron expulsados Diego Rojas en el local y Santiago Frías en la visita. Pero lejos de calmarse los ánimos, el ingreso de personal policial alteró aún más los ánimos e incluso hubo denuncias cruzadas de agresión, tanto de la policía como de jugadores.
En ese contexto el arquero aprendicista Sebastián Santoro -que volvía a su club luego de haber jugado la primera parte del certamen para el rival que ayer enfrentó- también fue expulsado por un incidente protagonizado frente a uno de los encargados de custodiar el orden, sobre quien dijo que lo había agredido.
Mientras tanto el juez asistente José Escalante también resultó lesionado en su pierna izquierda, según sus dichos por el impacto de un objeto contundente lanzado desde la parcialidad rojinegra, lo que apresuró la decisión de suspender tanto por parte del árbitro como del jefe del operativo policial.
El insistente pedido de los jugadores y dirigentes de ambos clubes para continuar con el partido fue en vano, pues el árbitro Alfredo Guzmán resolvió que al cumplirse 30 minutos de la primera etapa no estaban dadas las condiciones para proseguir y se mantuvo inflexible. Ahora será tarea del Tribunal de Disciplina. En tercera fue triunfo de Belgrano por 3 a 0.