En las últimas horas cobró notoriedad nacional el fallecimiento de Mario Melo como consecuencia de un paro cardiorrespiratorio tras haberse atragantado en un concurso de comer medialunas. El ex boxeador había sido el último rival al que enfrentó en Argentina el saenzpeñense Ángel “Cacho” Caro, previo a su retiro definitivo.
El hecho se produjo en la ciudad balnearia de Pinamar, en la provincia de Buenos Aireas, en el marco de la Fiesta de la Medialuna. En dicho evento ganaba quien más comía en el lapso de un minuto, pero el hombre se atragantó y terminó falleciendo, a pesar de las maniobras de reanimación que se le practicaron.
Conocida la noticia a través de los medios nacionales, el propio “Cacho” Caro comunicó a ECO Deportivo que Mario Melo había sido el último boxeador al que enfrentó en nuestro país antes de su despedida definitiva de los cuadriláteros, y se mostró compungido por esa información. Luego de ese combate, hizo dos peleas más en Paraguay y “colgó los guantes”.
“Fue en General Madariaga, en categoría medio pesado” recordó el púgil del barrio Sarmiento sobre aquella pelea del 7 de noviembre de 1987 (hace 31 años), para añadir que “me ganó pero le dije: Peleaste con la sombra de Cacho Caro”, en alusión a que ya tenía decidido su retiro de la actividad pugilística.
Un año antes, “Cacho” Caro había enfrentado en Villa Ángela a Juan Domingo “Martillo” Roldán, y tras ello también se midió con boxeadores de la talla de Darío Matteoni (por el título argentino “medio pesado”), y Néstor Hipólito Giovannini.
Mario Oscar “Mazazo” Melo tenía 56 años y en su carrera obtuvo los títulos argentino y sudamericano durante la década del 80. Había vuelto a la escena pública luego de una pelea controvertida con su colega “La Mole” Moli en 1997, después de haber vivido en una villa, donde se hizo adicto a la cocaína.